Leonardo 500: La Gioconda se une a la primera obra que SKEL lanzó como homenaje al gran genio renacentista en el V centenario de su fallecimiento en 2019. En esta ocasión, es el cuadro más famoso de la historia del arte y su imagen, los absolutos protagonistas de esta obra única.

Leonardo da Vinci comenzó a pintarla sobre el 1503, y le acompañó durante toda su vida. Aunque existen muchas teorías sobre su identidad, parece ser que es Lisa Gherardini, esposa del mercader florentino Francesco del Giocondo, quien se esconde bajo la sonrisa más enigmática de la historia del arte.

Basada en la técnica del sfumato, en la que se difuminan los contornos y se funden las luces y las sombras, llegó a París cuando Francisco I de Francia la compró y se expuso en el Louvre entre tantas otras obras. Su robo en 1911 marcó el inicio de un mito. Después de su recuperación fue expuesta por toda Italia antes de volver al museo parisino, triunfal, en 1914. Mona Lisa sigue causando una creciente admiración por su grandeza artística, su magnetismo y sus misterios. Es capaz de congregar en el Museo del Louvre a más de 20.000 personas al día.

La lámina de La Gioconda de esta obra única es una reproducción volumétrica. Obtenida mediante la técnica de relief-printing, que recrea la pintura y su craquelado (las pequeñas grietas prematuras formadas por la tensión del marco empleado durante su ejecución), y huellas labradas por el tiempo en el óleo y el barniz.

En el dorso se especifica la serie a la que pertenece, cuyo nombre es el de una ciudad en la que la pintura ha sido expuesta. Además, está pegada con dos puntos de cola a su soporte de papel dorado, como imitación al marco que la viste en el Museo del Louvre.

El volumen Leonardo: La Gioconda es un análisis específico de su historia, robo, viajes y repercusión desde su primera exposición hasta nuestros días. Con una cuidada selección de imágenes históricas sobre los traslados del cuadro, obras de grandes artistas que han imitado o se han inspirado en la Mona Lisa y la mayor colección de óleos del artista, con su máxima expresión en las cubiertas.

El estuche expositor de la obra ha sido diseñado expresamente para admirar el cuadro más famoso de la historia. Asimismo, tanto la lámina de La Gioconda, como la imagen de su detalle, y Cabeza de un anciano (conocido como autorretrato), obras que encuadernan el volumen, pueden mostrarse en el estuche, colocado en sobremesa.

Todas las obras vienen acompañadas de un Acta Notarial que certifica su calidad y su numeración, y de una Nota del Editor en clave de presentación.